En un entorno latinoamericano favorable, Uruguay está pasando por un momento de expansión y de crecimiento. Tomamos inicialmente como punto de referencia el año 2002; cuando se produjo una enorme crisis económica y social obligando a los gobiernos y administraciones públicas a una rápida implementación de programas sociales de inclusión. Algunos fueron urgentes y puntuales y otros, ya son de carácter permanente; resurgiendo y por necesidad cierto grado de “Estado de Bienestar”, tanto por motivos económicos (crecimiento) como ideológicos (gobiernos progresistas). De todas formas, se estarían dando nuevos fenómenos de exclusión social y polarización entre clases, en una sociedad que a pesar de todo sigue siendo una de las más equitativas de Latinoamérica.